miércoles, 4 de mayo de 2011

martes, 3 de mayo de 2011

Juegos Peligrosos...

Siento una confusión tremenda… me siento atraída por el hombre que jamás una mujer debe mirar. Pero que puedo hacer?... somos seres humanos…

No quiero eximir mi responsabilidad en cuanto a la atracción que tengo hacía él, pero creo que fui incitada a sentir esto. Jamás, y en ningún sentido –cuerdo- me podría haber fijado en él. Está por fuera del prototipo de hombre en el que suelo fijarme… ¿pero que va?... ahí está… caí redondito con cada una de sus miradas, con cada roce insignificante, con cada charla, con cada detalle, etc.

Cada vez que me mira, siento que lee cada uno de mis pensamientos. Cada vez que existe ese juego de palabras, de bromas, y por supuesto de miradas siento que su ego aumenta… Y es ahí donde me pregunto, de que le sirve tener un buen ego si no es capaz de hacerse responsable de él?... Su ego lo traiciona, pues su galantería, su juego de seducción, su coqueteo constante no le sirve de nada si el no es capaz de llevar a su final aquel juego.

Claro… es fácil “Calentar el agüita”. Pero para que hacerlo si en el fondo no vas a tomártela?... bastante coloquial mi frase, pero es la realidad. Yo no soy una blanca paloma, y tampoco pretendo serlo, e incluso reconozco que quizás también he hecho lo mismo, pero al menos ese juego que he empezado lo he terminado.

"No todo lo que se desea se ama, ni todo lo que se ama se desea”… Con esta frase dejo de manifiesto que no es amor lo que siento, al menos por el momento. Creo que todo ese “jueguito” – a propósito o inconscientemente, eso no lo sé….- me ha provocado ganas enormes de sentir su respiración, su olor, y su piel muy cerca de mi. Y principalmente el deseo enorme de besar sus labios…

¿Será algo normal para él, o será que lo hace con la finalidad de que sea yo quién actúe?... Esta incertidumbre de no saber a que juega realmente me deja un sazón amargo, me deja mil dudas, me hace incluso sentir ridícula…

Quizás por cuanto tiempo más seguiremos así…

Quizás sólo se quede todo en un Juego Peligroso...